miércoles, 2 de diciembre de 2009

Secretos en una caja

Que loco no?
Guardar tantas lágrimas y creerlas olvidadas, pero llegan en el momento que menos las pensas.

Cuando sentís que tenés todo controlado, solo aparecen sin pedirte permiso. Te quebrás.

Es raro, tener que admitir algo que te lastimo mucho en frente de mucha gente y sentir qe de verdad te escuchan, cuando muchas veces te paso de qe no te escuchen de verdad, es dificil.

Se te quiebra la voz, no podés seguir.
Intentás no mirar a nadie a la cara, decir lo que querías decir, y que se acabe el silencio. El silencio que comenzó cuando todos notaron como te dolía eso que acabas de decir y ese que se acaba cuando comienza a hablar el de al lado.
Esas risas que se detuvieron cuando notaron que se venia tu llanto, las ganas que tenias de un abrazo en ese momento, auqnue sabias que si te lo llegaban a dar morías ahí. Te destrozabas, pero quizas solo eso necesitas, llorar todo lo que te hace mal, para ir más liviana.

Al final las lágrimas no salieron del todo.
No llegaste a llorar.
Nadie te dijo nada cuando terminaste.
Te sentiste tan frágil.
No se si dolió, pero las lágrimas querían salir, tan solo eso.

Y ahora de vuelta a su caja, hasta que sin aviso salgan, no?
Hasta que una mínima brisa te destroce, te caiga?

Debe ser feo, no? Guardar tantos secretos en una caja.

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